No podía ni debía negarme a la invitación que por tercera vez se me ha hecho por parte de la Comisión de Fiestas de turno, para pregonar nuestras Fiestas Patronales en honor del Niño Bendito.

Ha hecho un siglo que comenzó la guerra europea de los Balcanes, se fundó el periódico Pravda, Picasso esculpió Guitarras y violines,
Alexis Carrell obtuvo el Nobel de medicina por sus estudios sobre
Trasplantes de órganos, pero 1912 pasó a la historia por el hundimiento del Titanic, más que por otro gran acontecimiento.

Y pasaba todo esto y ahí estaba Yegen, como dice Brenan: El lugar
Tenía algo que me resultaba atractivo. Era una aldea pobre, elevada sobre el mar, con un panorama inmenso a su frente. Sus casas grises en forma cúbica, en rápido descenso por la ladera de la colina y pegadas unas a otras, con sus techos de greda planos y sus pequeñas chimeneas humeantes. Al intentar hacer un recorrido histórico sobre Yegen, debemos remontarnos a la conquista de Granada en 1492, donde el valle de Lecrín, La Alpujarra y las demás sierras y marinas del reino, se incorporan a la Corona de Castilla, siendo gobernados por Alcaldes, bajo la orden del Corregidor de Granada, que era una especie de delegado del Gobierno de hoy.

La rebelión de la Alpujarra es un conflicto que se produce en el reinado de FelipeII entre 1568 y 1571. La población morisca de Granada se subleva contra una Ley que limitaba su libertad religiosa y la manifestación pública de su cultura. Tras un año infructuoso de negociaciones la Alpujarra se levantó en armas, acaudillada por D. Fernando de Córdoba y Válor, coronado rey en Narila, y D. Diego López nacido en Mecina Bombarón, que han pasado a la Historia como Abén Humeya y Abén Abóo. La cortijada de Montenegro era el sitio de descanso y divertimento de Abén Abóo, cuyo lugarteniente era Abén Iegén.
Consta que cerca de Montenegro, existía una alquería, organizada en dos barrios : el de arriba y el de abajo, cuyo nexo de unión era una gran plaza rodeada de huertos, llamándose barrio de Abén Iegén ó alquería de Abén Yexén.
¿ viene el nombre de Yegen de éste barrio y alquería ?. Con toda
Probabilidad que sí, aunque en la fundación del Arzobispado de Granada, entre 1515 y 1556, aparece un lugar cercano a Mecina Bombarón y dependiente de la Parroquia de Yátor como Egén, Ygén, y a partir de 1572 de una forma clara y precisa como Yegen.

Sabemos que a mediados del siglo XIX, este lugar ya tenía Ayuntamiento, Iglesia Parroquial, cárcel y una gran plaza y los barrios antes citados que corresponde a lo descrito en el siglo XVI
Con 1013 habitantes. Tras la expulsión de los moriscos, toda la Alpujarra es repoblada por gente de Castilla, como demuestran los apellidos inscritos en los archivos de nuestro Registro Civil.

Desde mediados del siglo XX, la gente de Yegen, vive en una economía de subsistencia, entre la agricultura, ganadería y repoblación forestal, con sus costumbres, tradiciones y cultura propia, descritas de forma magistral en el libro de Brenan. Pasada la guerra civil española nos encontramos un elemento nuevo en Yegen y en toda la comarca: La emigración, que entre otras cosas, ha sido la causa de la despoblación que comenzamos a padecer.

La emigración de gente joven del campo a la ciudad es un proceso antiguo que se aceleró con la Revolución industrial. La emigración, conlleva cambiar de residencia y de profesión; el cambio a la ciudad ofrece oportunidades distintas para prosperar más y mejor. La emigración es la suerte de los pueblos y de los individuos, a quienes su patria chica niega mejores condiciones de vida para satisfacer sus necesidades, en realidad es huir de la miseria, de la escasez de trabajo, del subdesarrollo, de la carencia de unos servicios básicos y del desarrollo técnico de una agricultura mejor planificada.

La ciudad oferta un peculiar atractivo: existiendo un mayor número de servicios asistenciales, educativos, culturales, informativos, de transporte y sobre todo de empleo. La ciudad crea empleo que tiende a se cubierto por la inmigración del medio rural.

En Yegen, en los años 50 se produce la gran oleada a América, sobre todo a Argentina, concentrándose la gran mayoría en la provincia de Mendoza. En los años 60 y 70 la emigración se centra en Alemania, Francia, Suiza, Cataluña, Baleares y Andorra.De tal manera que lo normal es que cualquier familia tiene parientes en estos focos receptores de emigración. Es a partir de los años 90 cuando se concentra en el Poniente Almeriense, a una hora de Yegen.

La gran consecuencia de la emigración es el deterioro y falta de población que se produce, si bien es verdad que en los últimos diez años Yegen se ha mantenido entre los 420 y 450 habitantes.

Sin lugar a dudas, podemos afirmar que el despertar económico, social,y cultural de nuestro pueblo se produce entre los 80 y 90 del siglo pasado. Nació el Festival de música, la Asociación G.Brenan,
Se construyeron el cementerio y el consultorio, se arregló el colegio, se pavimentaron las calles, se hizo nueva la Balsa y el depósito del agua y a la gente del campo se le ayudó con el subsidio. Posiblemente, en todos lo órdenes, hayan sido los mejores años de Yegen.

Pero………, han llegado las Fiestas, las Nuestras, antiguas y siempre nuevas, con olor a pólvora y Procesión, a reencuentro, a carreras de cintas y Misa Mayor. Es Año Nuevo, y todos merecemos lo mejor. Son las Fiestas, las nuestras, sed bienvenidos a ellas.

Antes de terminar, permitidme tener un recuerdo muy especial con todos aquellos que se fueron para nunca volver más y que nos enseñaron a ser mejores personas con nosotros mismos y con los demás.

¡¡¡FELIZ AÑO A TODOS Y VIVA EL NIÑO BENDITO !!!.

Agustín Lozano M.